domingo, 16 de octubre de 2016

UNA PEQUEÑA Y ENORME PARTE DE LA IDENTIDAD MEXICANA.



La virgen de Guadalupe parte de nuestra identidad adoptada en la colonia.




En el presente se realiza un análisis sobre las similitudes que presenta la Virgen de Guadalupe creada en México, en relación con La Virgen de Extremadura de origen español, las investigaciones  que arrojan a que posiblemente la primera virgen mencionada es una copia de la segunda y que impuso la iglesia en la época colonial para imponer un control en los indígenas y evangelizar La Nueva España.



Las autoridades eclesiásticas de la provincia de Extremadura en España sostienen que su Virgen de Guadalupe fue llevada a La Nueva España por evangelizadores franciscanos,  por esta razón se provocó que las autoridades de la Basílica de Guadalupe  cortaran el contacto con los franciscanos del Monasterio de Guadalupe.


Quizás una forma de explicar el surgimiento de La Virgen de Guadalupe es que Cristóbal Colón, Hernán Cortés e incluso los reyes católicos Isabel y Fernando eran devotos a la Virgen de Guadalupe de Extremadura, y en suma la corona española se vio en la necesidad de inventar un símbolo para controlar a la sociedad de la época virreinal.


El Fray Sebastián encargado del Monasterio de La Virgen de Extremadura en una charla con reporteros, menciona que la virgen del Tepeyac recibe una gran cantidad mayor de peregrinos devotos en comparación que Extremadura, tal así que se ha convertido en un símbolo de identidad nacional de México, incluyendo las sus palabras al decir que la copia se ha hecho más famosa que la original y que el indio Marcos Cipac pinto a la Virgen del Tepeyac tomando como modelo a la virgen de España.


Conclusión.


Llego a la conclusión que La Virgen del Tepeyac fue impuesta por los españoles en su llegada a Mesoamérica para tener un control, evangelizar e imponer su cultura a los nativos. La virgen de Extremadura no fue recibida en la Basílica para que no se observaran las similitudes entre ambas y las apariciones del indio Juan Diego solo son narraciones ya que cuando se empezó a hablar de ello fué un siglo después.


Bibliografía. 

Sanjuana, M. y Rodrigo, V. (2003). Las Guadalupanas: La mexicana, hija de la española. Revista proceso. Pp.36-45. 



2 comentarios:

  1. Que lástima que las patentes de esta gran imagen ya se la hayan apropiado a los Chinos. Pero lo bueno es que eso no es limitante para que el fervor, la fe y la confianza en este gran símbolo se desvanezca ya que los seguidores de la Virgen Guadalupan son nacionales e internacionales

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  2. Es verdad Any pero si investigamos nos vamos a dar cuenta de que no únicamente la imagen de la virgen, sino que gastronomía, prendas de vestir y hasta avances tecnológicos de creación mexicana han sido patentados por extranjeros, es una total desilusión.

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